David Funes, miembro de la unidad de atención integral al deporte nos cuenta en este artículo las pautas para mejorar el rendimiento deportivo con los resultados de una prueba de esfuerzo.
En la unidad del deporte del hospital San Juan de Dios realizamos test incrementales, tanto en cicloergómetro como en tapiz rodante. Una de las principales características que debe reunir un test de evaluación de la condición física es que sea específico a la modalidad deportiva y al deportista.
Por tanto, es fundamental que el test en cicloergómetro pueda realizarse en la propia bicicleta del sujeto. En el hospital de San Juan de Dios tenemos a disposición de los deportistas un ergómetro validado científicamente (Cyclus2) para que puedan realizar el test incremental sobre su propia bicicleta.
Además hemos desarrollado test propios que permiten determinar tanto el Umbral Anaeróbico Individual como el Consumo Máximo de Oxígeno (VO2max) de los deportistas Ambos parámetros son difíciles de determinar con un único test, por lo que suelen utilizarse test diferentes, tanto para el cálculo del Umbral Anaeróbico Individual (máxima intensidad de ejercicio a la que puede mantenerse una concentración de lactato en estado estable) como para el VO2max o consumo máximo de oxígeno.
El método Gold Standard para la determinación del MLSS (Maximal Lactate Steady State) exige al deportista alrededor de cuatro sesiones en el laboratorio, mientras que para el VO2max una o dos sesiones son suficientes.
Con la metodología empleada en la Unidad de Atención Integral al Deportista del Hospital de San Juan de Dios ofrecemos ambas zonas de intensidad en un único test.
Al finalizar el test se le entrega al deportista un informe completamente individualizado sobre cómo poder organizar y planificar su entrenamiento en función de los datos obtenidos durante la prueba, utilizando un monitor de frecuencia cardiaca (pulsómetro) y un potenciómetro.
El conocimiento de los parámetros obtenidos durante la prueba de esfuerzo, permiten valorar la capacidad fisiológica y ofrecen la posibilidad de alcanzar las metas deseadas a medio y largo plazo en los entrenamientos y competiciones.
Debe tenerse en cuenta que para realizar este tipo de pruebas de análisis de condición física, que exponen al deportista a situaciones de máximo esfuerzo, es necesario haber pasado previamente una revisión para descartar una enfermedad cardiovascular que condicione la práctica deportiva de alta intensidad.
La Unidad de Medicina Deportiva del Hospital San Juan de Dios de Tenerife, acreditada por el Servicio Canario de la Salud, lleva realizado desde hace más de 7 años revisiones de preparticipación tanto a deportistas amateur, como a deportistas de diferentes clubs representativos a nivel nacional y local.
Con la metodología empleada en la Unidad de Atención Integral al Deportista del Hospital de San Juan de Dios ofrecemos ambas zonas de intensidad en un único test.
Al finalizar el test se le entrega al deportista un informe completamente individualizado sobre cómo poder organizar y planificar su entrenamiento en función de los datos obtenidos durante la prueba, utilizando un monitor de frecuencia cardiaca (pulsómetro) y un potenciómetro.
El conocimiento de los parámetros obtenidos durante la prueba de esfuerzo, permiten valorar la capacidad fisiológica y ofrecen la posibilidad de alcanzar las metas deseadas a medio y largo plazo en los entrenamientos y competiciones.
Debe tenerse en cuenta que para realizar este tipo de pruebas de análisis de condición física, que exponen al deportista a situaciones de máximo esfuerzo, es necesario haber pasado previamente una revisión para descartar una enfermedad cardiovascular que condicione la práctica deportiva de alta intensidad.
La Unidad de Medicina Deportiva del Hospital San Juan de Dios de Tenerife, acreditada por el Servicio Canario de la Salud, lleva realizado desde hace más de 7 años revisiones de preparticipación tanto a deportistas amateur, como a deportistas de diferentes clubs representativos a nivel nacional y local.