El área de voluntariado del Hospital San Juan de Dios de Tenerife refuerza su actividad

Personas que generosamente regalan su tiempo, conocimientos y compromiso son piezas claves en San Juan de Dios Tenerife

El Hospital San Juan de Dios de Tenerife ha afianzado su proyecto de reestructuración del voluntariado con una serie de acciones encaminadas a conocer las necesidades del Centro  con el objetivo de elaborar una cartera de servicios apta a las expectativas de nuestros usuarios actuales.
María Isabel de La Rosa indica que durante este semestre nos hemos volcado en la formación de los voluntarios tanto con el apoyo del Comité de Dirección como de profesionales del Centro y de la Plataforma de Tenerife Voluntario, hemos logrado sensibilizar al alumnado escolar dentro del programa de Red de Escuelas Solidarias, lo que ha permitido incorporar jóvenes estudiantes a actividades puntuales.
Entre los objetivos del área de voluntariado está el participar en las campañas de sensibilización de diferentes colectivos, acompañar y formar a los voluntarios en los valores de la Orden y el Modelo Asistencial. Garantizar el acompañamiento, la adaptación y la no interferencia en los circuitos de trabajo de los profesionales.
En la actualidad, el Hospital San Juan de Dios cuenta con un equipo de 25 voluntarios, de los cuales 6 hombres, 21 mujeres, que se comprometen a ejercer su labor en determinados horarios. Durante el primer semestre se han atendido más de 600 personas. 
Entre las actividades del voluntariado destacamos el acompañamiento, la cercanía y el buen humor con el que acompañan a los enfermos de media y larga estancia, el cariño con que ayudan a orientarse a las personas que acuden a nuestro Centro, la colaboración que prestan en los diversos talleres que se desarrollan en el Centro Psicopedagógico, así como la colaboración de calidad que prestan en las horas de comidas y meriendas, así explica María de La Rosa, Directora de Desarrollo Solidario
El voluntariado es una forma de solidaridad que nace en la Orden Hospitalaria desde su fundador, San Juan de Dios,  como una energía solidaria más, protagonizada por todas aquellas personas que, de un modo altruista, organizado y estable, trabajan en beneficio de la comunidad, facilitando el cambio de las desigualdades existentes.