El CAD Triana desarrolla un programa de actividades para mejorar la integración social de los usuarios

Los usuarios del Centro de Atención a la Discapacidad Triana, dependiente del Cabildo de La Palma y gestionado por la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, han llevado a cabo recientemente diferentes actividades dirigidas a mejorar su integración social mediante el desarrollo de acciones vinculadas a la dinámica diaria.

En este caso, los usuarios llevaron a cabo una jornada de actividad en Los Llanos de Aridane, que incluyó la utilización del transporte público para llegar a dicho municipio, la realización de compras de diferentes productos para el centro, al mismo tiempo que se trasladaron a las dependencias municipales para efectuar diligencias.

Con estas acciones se pretende que los usuarios establezcan un contacto real con aspectos habituales de la vida ordinaria de cara a que puedan utilizar los recursos que cualquier ciudadano tiene a su alcance, facilitando de esta forma su integración social. A su vez, se pone el acento en que aprendan las habilidades necesarias para desenvolverse en el entorno más cercano.

El Centro de Atención a la Discapacidad Triana cuenta con 36 usuarios en régimen residencial, a los que se sumarían otros once del Centro de Estancia Diurna Triana y ocho del Centro de Estancia Diurna Dorador.

La participación, la accesibilidad, la continuidad asistencial, la seguridad clínica y la gestión de procesos son las premisas fundamentales en el trabajo diario de los más de 60 profesionales que forman parte del equipo multidisciplinar que trabaja en estos tres centros y en el que se apuesta por el desarrollo de un programa de atención individual que potencie una intervención psicopedagógica más rehabilitadora.

San Juan de Dios es una institución con más de 500 años de historia, que ha mantenido con convicción el valor de la hospitalidad como núcleo esencial. Dicha dimensión solidaria pasa por acoger, acompañar y comprometerse con los que más lo necesitan tomando los valores de la calidad, el respeto, la responsabilidad y la espiritualidad como ejes de la actividad.